Uno de los elementos más característicos de las costas de Galicia y que las han adornado durante siglos son sus faros. Estas torres de luz, erigidas en acantilados, islas o cabos, han guiado a navegantes, pescadores y exploradores a través de aguas a menudo traicioneras.
Los faros son guardianes y cada uno cuenta con su propia historia, arquitectura y leyenda. En Carrís Hoteles, te invitamos a descubrir algunos de los más emblemáticos y cercanos a nuestros destinos, para que su luz acompañe también tu viaje.
Torre de Hércules: la eterna vigía de A Coruña
En A Coruña, la Torre de Hércules se alza como el faro romano en funcionamiento más antiguo del mundo. Fue construida en el siglo I, reformada en el XVIII y declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2009. Para llegar a su cima, debes subir 234 escalones, pero merece la pena: desde lo alto podrás ver una panorámica impresionante del Atlántico.
Este monumento es un emblema de la ciudad y ha estado ahí como testigo de su nacimiento, crecimiento y evolución. Sin duda, es uno de los puntos imprescindibles en tu viaje.
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Faro de Cabo Vilán: la luz que dominó las tinieblas
A unas dos horas en coche desde A Coruña, el Faro de Cabo Vilán se encuentra en la abrupta Costa da Morte. Fue el primero en España en utilizar luz eléctrica en el año 1896, lo que marcó un hito en la seguridad marítima. Y no es de extrañar, ya que está en uno de los tramos más peligrosos de la zona.
Su torre de 25 metros se eleva sobre un acantilado de 125 metros de altura y ofrece una vista sobrecogedora del mar abierto. Su enclave fue declarado de Interés Nacional en 1933 y hoy es un monumento natural.
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Faro de Punta Nariga: arquitectura contemporánea frente al océano
También en la Costa da Morte, pero con un diseño muy distinto, se encuentra el Faro de Punta Nariga, en Malpica de Bergantiños. Obra del arquitecto César Portela, se inauguró en el año 1997 y es considerado el farol más moderno de Galicia.
Su estructura, que recuerda a la proa de un barco, se integra de manera armoniosa con las rocas graníticas del cabo. Antes, lo acompañaba la escultura del ‘Atlante’, una obra de Manuel Coia que representaba a un ser mitad humano, mitad gaviota. Sin embargo, fue robada en el año 2022.
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Faro de Cabo Silleiro: centinela de la ría de Vigo
En la entrada sur de la ría de Vigo, el Faro de Cabo Silleiro ha sido, desde 1924, guía para embarcaciones que se adentran o abandonan estas aguas. Originariamente, se encontraba a nivel del mar, pero se trasladó a un edificio situado a una mayor altitud. Hoy en día, es uno de los puntos principales de orientación para los navíos en esta ría.
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Faro de Felgueiras: la poesía de Oporto
En Portugal, el Faro de Felgueiras se sitúa en la desembocadura del río Duero, donde las olas del Atlántico rompen con fuerza contra el espigón de piedra. Este faro, construido en 1886, es uno de los iconos más románticos de Oporto. Durante los temporales de invierno, las imágenes de su torre resistiendo el embate de las olas son tan sobrecogedoras como inspiradoras.
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Más allá de la luz: experiencias para el viajero
Todos los faros que hemos mencionado tienen una arquitectura o historia dignas de que las conozcas. Pero también te ofrecen la excusa perfecta para recorrer caminos costeros, sentir la inmensidad del océano y conectar con una tradición marinera antigua, pero que sigue viva. Muchos de estos enclaves cuentan con senderos señalizados, miradores y, a veces, hasta centros de interpretación.
En Carrís Hoteles, creemos que la mejor forma de descubrir los faros del Atlántico es integrarlos en un itinerario que combine cultura, gastronomía y descanso. Desde nuestros alojamientos en A Coruña, Ourense, Santiago de Compostela y Oporto, es posible planificar excursiones personalizadas que te permitan gozar de estos guardianes de la costa con el confort y la atención que nos caracterizan.
